cultura del asesoramiento financiero está muy arraigada en España. De hecho, es uno de los países donde más se recurre a consejos externos para invertir los ahorros. También es uno de los pocos en los que casi todo el peso recae los bancos tradicionales, que lo ofrecen de forma gratuita.La mayoría de ahorradores se han acostumbrado a este modelo gratuito de asesoramiento financiero y a muchos les cuesta pagar por un asesoramiento financiero personalizado. Sin embargo, el viejo dicho de que lo barato puede salir caro también aplica en las inversiones. Si el banco no te cobra directamente por sus consejos no te preocupes, que ya estará facturando por otro lugar.En este sentido, a un asesor financiero tendrás que pagarle por sus servicios, pero gracias a él puedes incluso ahorrar dinero, además de asegurarte de que tu ahorro crece al ritmo que quieres.
Los mercados pueden ser peligrosos, especialmente para el inversor novato o quienes no cuentan con una estrategia de inversión bien definida. Del mismo modo que para cruzar un bosque tenebroso buscarías la ayuda de un guía que conozca el terreno, al invertir también deberías hacerlo. Este guía es el asesor financiero, que te ayudará a sortear las trampas y a encontrar el camino para lograr tus objetivos.Si optas por caminar sólo no encontrarás un mapa ajeno que te indique el camino por más que te lo prometan autoprocalmados gurús del trading y cada paso en falso te costará dinero. ¿Estás dispuesto a asumirlo? ¿Tienes suficiente capital para hacerlo? Empezar con un guía mientras vas aprendiendo cómo funciona ese bosque que son los mercados te ayudará a ganar tiempo y hará que aprendas más rápido. A fin de cuentas, aprender a invertir no sale gratis.
Como ya hemos mencionado el asesoramiento del banco nunca es gratuito. Terminarán pagando por sus consejos de una u otra forma. En el mejor de los casos será ‘sólo’ a través de brutales comisiones pro productos del montón que lastrarán tu cartera. No perderás dinero en términos relativos, pero sí dejarás de ganar mucho.El efecto de las comisiones cuando inviertes a largo plazo puede ser devastador. Aquí, un ejemplo.
Y esto es solo en el mejor de los casos. En el peor de ellos puedes verte atrapado en acciones preferentes, salidas a bolsa como las de Bankia, acciones propias del banco como las de Popular y productos que ni son para ti ni entiendes. Con estas recomendaciones no sólo dejarás de ganar dinero, sino que perderás efectivamente buena parte o todos tus ahorros.Un asesor financiero independiente conoce la realidad de los bancos y no trabaja con ese tipo de productos. Su único interés es ayudarte a lograr tus objetivos financieros con los productos mejor adaptados a tus necesidades.
Los impuestos juegan un papel clave en la inversión. Y es que existe una enorme diferencia entre la rentabilidad real y la nominal al invertir.Toda inversión tiene que pasar por la caja de la Agencia Tributaria. Si no eliges bien Hacienda se puede ‘comer’ literalmente más de una cuarta parte de los ahorros de tu vida. Los planes de pensiones son el mejor ejemplo: apuesta por ellos y podrás pagar un poco menos en la renta todos los años. A cambio prepárate a pagar muchos más impuestos al rescatarlo.Por último, con un asesor financiero tomarás mejores decisiones para tu dinero, ¿Es el momento de comprar casa? ¿Merece la pena amortizar parte de la hipoteca? Un asesor financiero no es un especialista en vivienda, pero si la relación es la adecuada tendrá una idea muy clara de tu situación patrimonial. En base a ella podrá orientarte sobre el máximo a destinar a la vivienda y ayudare a que veas tu casa como lo que es: un activo financiero.Del mismo modo, también puede ayudarte a decidir entre una hipoteca a tipo variable o a tipo fijo e incluso darte algún consejo para negociar con el banco. Y este es solo un ejemplo.